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La Sirena - Mujer Seductora por Naturaleza


La Seducción es un arte femenino que llego al mundo masculino, y esto hay que tenerlo muy presente ya que como hombres todos somos susceptibles de la seducción que realizan las mujeres con nosotros, por ello es necesario conocer cuáles son sus armas y sus estrategias.

El conocimiento de las mujeres, de su carácter, de su naturaleza caprichosa e inestable es el primer deber de todo seductor. Pero un seductor no debe limitarse al conocimiento de las mujeres. Hay que consagrarse igualmente al estudio de los usos, los gustos y los errores del siglo, de la época en que se vive. Toda sociedad tiene por norma ciertas virtudes, talentos, placeres, que son totalmente arbitrarios, fruto de la convención, y que nada tienen que ver con la auténtica virtud.

El Diccionario Robert emparenta al seductor con el encantador, con el mago; a la seductora con la sirena, la que hechiza con su canto. Como todos sabemos seducir es un misterio, pero ser seducido lo es aún más.

Con ayuda de las teorias de Robert Greene (The Art of Seduction) y algunas otras anécdotas e historias vamos a describir y conocer un poco mas a la Sirena el arquetipo seductor femenino por naturaleza.

En el mito de la Sirena se conjugan la seducción y la prohibición. La sirena en su cuerpo dividido (mujer-pez) presenta la paradoja en la que un cuerpo se encuentra erotizado pero rehúsa cualquier contacto con el otro. Refleja una sensualidad de la que no se puede hacer cargo.

La sirena representa una belleza ideal expresada a través del sonido. El canto de la sirena: La música que embriaga, adormece e hipnotiza con una promesa de amor eterno, pero nunca cumplido.

En la obra “La Odisea” de Homero se cuenta que para protegerse del canto de las sirenas, Ulises tapó sus oídos con cera y se hizo encadenar al mástil de la nave. El canto de las sirenas lo traspasaba todo, la pasión de los seducidos habría hecho saltar prisiones más fuertes que mástiles y cadenas.

Todas estas míticas, épicas y fantasiosas historias esconden entre líneas grandes verdades y principios, muchos de los cuales han sido usados por un gran número de mujeres entre ellas Cleopatra y Marilyn Monroe famosas por su maestría en el arte de la seducción.

Ahora bien pasemos a definir que es una mujer sirena:

Una mujer sirena representa la ultima fantasía masculina, ya que ofrece la liberación de todas las limitaciones de la vida, de todas las tensiones, de todo el estrés, de toda la carga de responsabilidades, lleva al hombre a un mundo de puro placer. La mujer sirena es atrevida y teátrica, histriónica por naturaleza, si ella se propone conquistar a alguien no para hasta conseguirlo.

El poder de la mujer sirena no radica en su apariencia (no siempre suelen ser las más bellas o atractivas) su habilidad descansaba en poder distraer a un hombre, y para ello se ayudan tanto de su apariencia y el maquillaje así como de un tono de voz musical e intoxicante, son una mezcla de inocencia con perversidad.

En el fondo estas mujeres estimulan la fantasía del placer, mostrándose ofensivas y frágiles a la vez, esa ambigüedad de ser casi frágil y sexualmente peligrosa e impredecible es una mezcla fatal.

Estas mujeres cuyo prototipo o modelo a seguir es la diosa Afrodita, proyectan vulnerabilidad y se hacen adoptar, dándole la sensación al hombre de que es un protector, operan en las emociones básicas masculinas (sensualidad y deseo) volviendo a los hombres niños o esclavos.

La mujer sirena utiliza su presencia física como un instrumento, pero no toda mujer físicamente atractiva es una sirena; una sirena es extremadamente astuta en el arte de la seducción, al grado de llegar a convertirse en la máxima fantasía sexual de los hombres, son el hedonismo puro materializado en una mujer confiada, proveedora de placer y un poco peligrosa.

Estas mujeres trabajan en la voz, en el cuerpo, en sus adornos y movimientos; su símbolo es el agua ya que su promesa es el placer y las aventuras infinitas, y a su vez pueden escurrirse de tus manos fácilmente.

Pero aunque una mujer sirena nos distrae con su espectáculo y su presencia sensual intensa, mostrándose alusivas y distantes, todas ellas tienen un gran conflicto interno inconsciente, su gran carencia de afecto, su gran vacío, el punto clave donde uno puede voltearles el juego.

La mujer sirena da una falsa apariencia ocultando su vacio, es extremadamente astuta, ya que su interior vacio, limitado y carente la hacen dependiente y adicta de aquella persona que logre conocer su necesidad, su contraparte es el hombre seductor ya que no todos logran dar la talla; así que si no sabes a lo que te enfrentas puedes sucumbir ante sus encantos y terminar negociando tus propios principios y tu propio carácter.

Y aunque las mujeres sirenas son muy irracionales, fantasiosas, soñadoras, banales y superficiales, son una gran liberación para los hombres que están presos en sus propias mentes como los políticos e intelectuales que tienen muchas cosas a cargo.

Su peligro es que generan odio y envidia especialmente entre las mujeres, estas mujeres no son conscientes de que su belleza es algo efímero y dejan de trabajar la parte de la personalidad.

Lo que la mujer sirena en el fondo busca es poder y atención, para compensar ese gran vacío en su interior.

Saludos y hasta la proxima

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