Ads Top

El Arte de Vivir Sanamente


Recientes investigaciones han demostrando que los factores psicológicos pueden desempeñar un papel importante tanto en la aparición como mantenimiento de algunas enfermedades. A este tipo de enfermedades se les denomina enfermedades psicosomáticas.

Una enfermedad psicosomática es una dolencia física real producida, total o parcialmente, por conflictos emocionales subconscientes o cualquier otro factor de tipo psicológico. Los médicos todavía no comprenden bien cómo las emociones pueden alterar las funciones de los órganos hasta ese grado, pero es indudable que lo hacen.

Estas enfermedades tienen su origen en un conflicto psicológico que se expresa a través de un síntoma físico. Las emociones y sentimientos negativos que no se pueden exteriorizar se manifiestan orgánicamente.

Muchos trastornos y enfermedades están relacionados con interpretaciones irracionales sobre la realidad y con la forma que tenemos de enfrentarnos a ella. El médico Dráuzio Varella nos comparte una serie de pasos que debemos seguir para evitar enfermarnos.

Expresa tus sentimientos

Emociones y sentimientos que son escondidos, reprimidos, acaban en enfermedades como: gastritis, úlcera, dolores de espalda, dolor en la columna.
Con el tiempo la represión de los sentimientos degenera aún en cosas peores.
Entonces vamos a desahogarnos, hacer confidencias, compartir nuestra intimidad, nuestros secretos, nuestros pecados.
El dialogo, el habla, la palabra, es un poderoso remedio y excelente terapia.

Toma decisiones

La persona indecisa permanece en la duda, en la ansiedad, en la angustia.
La indecisión acumula problemas, preocupaciones, agresiones.
La historia humana está hecha de decisiones.
Para decidir, es necesario saber renunciar, saber perder ventaja y valores para ganar otros.
Las personas indecisas son víctimas de enfermedades nerviosas, gástricas y problemas de la piel.

Busca soluciones

Las personas negativas no ven soluciones y aumentan los problemas.
Prefieren la lamentación, la murmuración, el pesimismo.
Mejor es encender el fósforo que lamentar la oscuridad.
Es pequeña la abeja, pero produce lo más dulce que existe.
Somos lo que pensamos.
El pensamiento negativo genera energía negativa que se transforma en enfermedad.

No vivas de apariencias

Quien esconde la realidad, finge, toma pose, quiere dar siempre la impresión de que está bien, quiere mostrarse perfecto, tolerante, etc., está acumulando toneladas de peso.
Es una estatua de bronce, pero con pies de barro.
No hay nada peor para la salud que vivir de apariencias y fachadas.
Son personas con mucho follaje y poca raíz.
Su destino es la farmacia, el hospital, el dolor.

Acéptate

El rechazo de si mismo, la baja autoestima, hace que seamos capataces de nosotros mismos.
Ser yo mismo es el núcleo de una vida saludable.
Los que no se aceptan son envidiosos, celosos, imitadores, competitivos, destructivos.
Aceptarse, ser aceptado, aceptar las críticas, es sabiduría, sentido común y terapia.

Se honesto

El mentiroso y deshonesto necesita mentir para sobrevivir.
Vende una imagen falsa, camufla su "yo real", es un fugitivo de la luz y amante de las tinieblas.
La falta de transparencia es un pacto con la corrupción.
Personas así viven bajo la amenaza, el miedo, la trampa, la falsedad, el insomnio, la pesadilla.
Son candidatos a la enfermedad, porque ya viven en la insanidad mental y ética.

Confía

Quien no confía, no se comunica, no se abre, no se relaciona, no crea lazos profundos, no sabe hacer amistades verdaderas.
Sin confianza, no hay relaciones.
La desconfianza es la falta de fe en si mismo, en los otros y en Dios.
Quien desconfía del médico, perjudica la cura.
Quien desconfía del psicólogo, nunca se abre, solo puede enfermarse.

Vive siempre Feliz

El buen humor, la carcajada, el tiempo libre, la alegría, recuperan la salud y proporcionan larga vida.
La persona alegre tiene el don de alegrar el ambiente en que vive.
El buen humor nos salva de las manos del doctor.
La alegría es salud y terapia.

Recordemos en muchas ocasiones la enfermedad física es el resultado de un desequilibrio emocional que persiste a través del tiempo.

Como dice Boris Cyrulnik “Todas nuestras emociones se inscriben al nivel del cuerpo”.


Saludos y hasta la proxima

Con tecnología de Blogger.